Ya llega de la Navidad, llega la alegría, y queremos despedir el año de la mejor manera posible y no pensamos en los excesos que cometemos con la comida y las posibles alergias asociadas a la misma. ¿Qué debemos tener en cuenta en esta época del año para no acabar pasando una mala noche con las molestas complicaciones gastrointestinales?
¿QUÉ COMEMOS EN NAVIDAD?
Sabemos que en esta época algunos ganamos uno o dos kilos más que luego nos cuesta bastante eliminarlos, eso se debe normalmente a que comemos sin moderación, y normalmente bebemos en exceso.
De por si la comida, en estas fechas tan señaladas, suele tener muchas calorías si eso le añadimos la ingesta de alcohol, esas calorías se disparan. Y normalmente no quemamos dichas calorías porque los días festivos paran nuestra rutina diaria y no hacemos ejercicio por los compromisos que tenemos o los desplazamientos que debemos hacer para estar con nuestros familiares.
Si normalmente el cuerpo de un adulto sano necesita, entre unas 2.000-2.500 calorías al día en el caso de los hombres, y unas 1.500-2.000 calorías al día en el caso de las mujeres, en las navidades solemos ingerir en una sola comida o cena unas 2.300 calorías. Por lo que podemos decir que en una sola ingesta sobrepasamos las calorías necesarias diarias. Y si además los alimentos que tomamos tienen un alto contenido en grasas, colesterol, proteínas y sal, y la cantidad de hidratos de carbono es baja lo contrario que los azucares simples que es muy elevada, tenemos una combinación bastante peligrosa para no disfrutar adecuadamente de las Navidades.
Si a este elevado consumo de calorías le añadimos la posibilidad de padecer alergias alimentarias, malas digestiones, acumulación de gases, acidez y ardor o incluso algún ataque de gota pues tenemos un cóctel molotov, que desearíamos evitar.